Sabia virtud de conocer el tiempo...

Por: Pablo Rojas Durán

Instructor del IPNL Mty

“Era impresionante la forma en que observaba cada detalle del edificio, en unos minutos tenía identificados los puntos más vulnerables en caso de un terremoto, las salidas de emergencia, los extintores, el acomodo de los muebles…realmente quede impactado. Sin embargo…parecía no disfrutar plenamente los momentos que dedicábamos para platicar sobre los sucesos del día”.

Estas fueron las palabras de un buen amigo cuando me compartía su experiencia de haber conocido a un compañero de estudio con entrenamiento israelí para la guerra. Reflexionamos después sobre lo bueno que es disfrutar cada momento y a su vez discutíamos sobre la importancia de planear nuestro futuro. Enfrascados en una enriquecedora plática, nos pusimos a pensar en la vida de ese estudiante y confabulamos un sin número de posibilidades sobre los beneficios y contradicciones de su estilo de vida. Recuerdo que tomamos una servilleta, que aún conservo, la dividimos con una línea y empezamos a escribir:

Beneficios: Sobrevivir en caso de desastre o ataque, estar en posibilidad de ayudar oportunamente a quien esté en peligro, ir siempre un paso adelante, anticiparse a los cambios y pasarlos rápidamente…

Contradicciones: Quedarse sólo con la forma y perder de vista el fondo de las cosas, no percibir todas las emociones que produce una buena plática, olvidar con facilidad aspectos que pudieran ser importantes para otros…

Continuando con la charla le dije a mi amigo - “bueno…pero ¿qué contradicciones tendría si hubiera puesto toda su atención a tú plática?...” – y soltando una carcajada me respondió - “moriría en caso de desastre”. “Sí, pero muy feliz”, le conteste.

Hay quienes viven “a través” del tiempo y otros que viven “en” el tiempo. Los primeros son muy previsores, los otros suelen enfocase a cada preciso momento. En los dos casos se pueden perder de vista algunas cosas, pero al final del día lo importante es identificar el estilo que desarrollamos acorde a nuestros aprendizajes y adecuarlo acorde a nuestras expectativas.

Independientemente del estilo que elijamos, lo relevante para la Programación Neurolingüística no es decantarse o favorecer un estilo en particular, sino generar competencias para alcanzar las metas fijadas y vivir plenamente los procesos de la vida, aprendiendo y cambiando de estrategia  según nuestras necesidades y propósitos. Es decir, podemos vivir a través del tiempo, anticipándonos con oportunidad a los cambios y vivir en el tiempo, tratando de abrazar cada experiencia. Todo depende la forma en que decidamos programar la administración de nuestro tiempo.